De nuevo vuelvo a meterle los pinceles a los No Perdonados y ésta vez a un Sargento que por lo visto se ha ganado a base de sangre y sudor (y buenas tiradas de dados) un lavado de cara acorde con su posición.
Me pidieron que trabajase en detalle todo lo que pudiese de la miniatura... al ser un "simple" táctico no había mucho de donde sacar, por lo que le dí franjas en la espada sierra, he añadido calcos en piernas y armas y he trabajado más la peana.
Para darle más presencia al sargento en su peana, lo hice subido a unas ruinas. Una vez terminé de pintarla, di un efecto húmedo a la tierra para que parezca que se está abriendo paso por un lodazal.
Espero que os haya gustado, un saludo!
muy chulo, tanto la mancha de sangre como los desconchones
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